Título: Atrapa la luna
(Keeping the moon).
Autora: Sarah Dessen.
Editorial: Maeva Young.
Páginas: 253.
Edición: Tapa blanda con solapas.
Nota: 8/10
Sinopsis: Mientras su madre, la reina del aeróbic Kiki Sparks, pasa el verano de gira por Europa, a Colie, de quince años, le toca quedarse con su tía Mira en un aburrido pueblecito de Carolina del Norte. Está convencida de que va a ser el peor verano de su vida, pero pronto se da cuenta de lo equivocada que está. Por un lado, su tía es escéntrica pero encantadora; por otro, gracias al destino o la casualidad, Colie consigue un trabajo de camarera donde hará los primeros amigos de su vida: Morgan, Isabel y Norman. Entre los tres conseguirán que al final del verano Colie se quiera y se vea así misma de otra manera.
Opinión personal (sin spoilers):
De Sarah Dessen, antes de coger y devorar Atrapa la luna, solo había leído Una canción para ti, libro que me encantó y me cautivó hasta puntos insospechados por su sencillez, su historia y su dulzura. Y por ahora aún no he tenido el placer de leer Just Listen, que sigue en mi lista de deseos, pero tenía muchas ganas de poder leer Atrapa la luna después de lo mucho que me gustó su primer libro y, tal y como esperaba, fue un libro que no me decepcionó.
Nos encontramos con un libro de trama sencillita y a primera vista simplona, pero que nada más empezar ya nos damos cuenta de que es un libro especial y único, porque en la trama hay entretejido un mensaje muy positivo y de ánimo a todo el que lo lea, que aunque a veces no se note mucho, el subconsciente del lector lo capta enseguida. Además la trama es juvenil, fresca y adictiva como nos tiene acostumbrados la autora y además es el tipo de lectura ideal para desconectar de grandes sagas o grandes libros y que, además, os encantará y os calará hondo por el mensaje que transmite la novela.
El ritmo es rápido, es una novela que pasa con un ritmo bastante rápido porque, además, es un libro de letra grande y bastante cortito, quizá diría que incluso demasiado ya que cuando lo terminé me quede con ganas de ese "algo más", de unas páginas de más para saber como habría seguido en un futuro la historia de Colie. Es justo como si lo mejor de la novela empezara justo cuando cierras el libro, aunque eso creo que en parte también es bueno, porque significa que la autora te ha sabido atrapar dentro de la historia, que te ha metido de ello en sus páginas y que lo que te ha contado ha gustado.
En cuanto a personajes, como siempre nos encontramos con los maravillosos personajes de Sarah, en el que cada uno es especial a su manera y siempre hay personajes de lo más peculiares que, aún así, nos tocan siempre el corazoncito. Me encantaron Morgan e Isabel, cada una con sus particularidades y sus manías, pero sobretodo Isabel, porque sobre esa capa borde y fría vemos a una persona que lucha por ayudar a Colie en todo, y ya no solo a Colie, sino también a Morgan, cuando ella misma también necesitaría que le echaran una mano. Y después esta Norman, el personaje masculino, que me pareció genial, especial y como siempre, adorable.
Esta vez, Sarah con su historia nos pretende dar un mensaje de superación, de aceptación y de lucha, a la vez de un gran mensaje de amistad y de superar los miedos de cada uno aceptándonos como somos sin complejos. Es genial como la autora consigue introducir los mensajes en estas historias y a la vez, llegar al corazón de todos sus lectores. Me ha encantado y sin duda, espero poder leer más sobre Sarah bien pronto.
Una novela con una historia sencillita y fresca pero con un trasfondo mucho más profundo. Nos encontraremos con unos personajes que nos encantarán y a la vez nos enseñarán el valor de la amistad y también la superación de cada uno de nuestros miedos. Una historia simple pero preciosa.
~Agradecimientos a Maeva Young~