Akemi Dawn Bowman
Traducción de Paz Pruneda
Fandom books
400 páginas
Sinopsis:
Kiko siempre ha tenido dificultades para decir exactamente lo que piensa. Con una madre que le hace sentir insignificante y una herencia medio japonesa que no termina de entender ni aceptar, prefiere mantener la cabeza gacha, convencida de que una vez que ingrese en una escuela de arte y pueda marcharse de casa comenzará una nueva vida.
Sin embargo, no es admitida en la escuela que ella deseaba y, por si fuera poco, su tío, al que no puede ni ver, se traslada a vivir con ella y su familia. Cuando recibe una invitación de su amigo de la infancia para dejar su pequeña ciudad y darse una vuelta por las escuelas de arte de la costa oeste, Kiko se aferra de inmediato a la oportunidad, a pesar de todas las ansiedades y miedos que amenazan con retenerla.
Sin embargo, no es admitida en la escuela que ella deseaba y, por si fuera poco, su tío, al que no puede ni ver, se traslada a vivir con ella y su familia. Cuando recibe una invitación de su amigo de la infancia para dejar su pequeña ciudad y darse una vuelta por las escuelas de arte de la costa oeste, Kiko se aferra de inmediato a la oportunidad, a pesar de todas las ansiedades y miedos que amenazan con retenerla.
Opinión personal (sin spoilers):
Cuando vi la propuesta de Vero para la lectura de este libro, tras haber leído su sinopsis, no me lo pensé demasiado. Tenía buena pinta y muchos puntos para que fuera una novela que consiguiera gustarme desde su inicio. En ese caso no me equivoqué, ya que disfruté mucho de ella. Aunque no esperaba que me fuera a gustar tanto como lo hizo.
Como primera premisa nos encontramos a Kiko, nuestra protagonista, quien siempre se ha dedicado al arte y que no quiere otra cosa en la vida que ser aceptada en Prism para huir de su casa y así poder disfrutar de lo que la hace realmente feliz, que es pintar. La premisa es bastante simple al principio pero a medida que nos vamos adentrando en la historia vemos una sub-trama y unos motivos mucho más turbios que, la verdad, no me esperaba para nada y me hicieron sufrir durante todo el desarrollo de la historia. La historia, sobre todo una vez terminada, me hizo pensar y reflexionar sobre algunas cosas. La autora crea una historia que a primera vista puede resultar sencilla pero que no es tan fácil como puede parecer y donde consigue que el lector se implique con Kiko y los acontecimientos que le van sucediendo a su vez.
Sin duda, lo que más peso tiene en este libro junto a los acontecimientos que van sucediendo en la trama, son sus personajes. El gran peso de la historia lo lleva Kiko, nuestra protagonista. Pero encontraremos otros personajes (mejores y peores, aunque en este libro los peores son muy peores) que nos harán sentir un gran abanico de sentimientos a medida que vayamos descubriendo qué va sucediendo en la vida de la protagonista. Destaco sobre todo el gran crecimiento personal y la gran evolución de nuestra protagonista, a la que vemos poco a poco hacerse un poquito más fuerte sobre toda esa gente que solo busca herirla y hacerla estar triste. También tengo que destacar el personaje de Jamie, que sin duda es un gran peso para que Kiko pueda crecer como persona, pero a su vez no es su muleta, sino que Kiko consigue crecer sin necesitarse a nadie más que a ella sola, y eso, personalmente, creo que es un gran mensaje. El personaje de Jamie es un amor y nos hará suspirar muchas veces durante la novela.
Por otra parte, como os he dicho, los malos personajes, los que le hacen sufrir a Kiko... Van mucho más allá de lo que yo esperaba y buff, a ratos era durillo leer según qué cosas que nos contaba nuestra protagonista y, sobre todo, ver cómo para ella era muy complicado enfrentarse a todo eso sola.
Como primera premisa nos encontramos a Kiko, nuestra protagonista, quien siempre se ha dedicado al arte y que no quiere otra cosa en la vida que ser aceptada en Prism para huir de su casa y así poder disfrutar de lo que la hace realmente feliz, que es pintar. La premisa es bastante simple al principio pero a medida que nos vamos adentrando en la historia vemos una sub-trama y unos motivos mucho más turbios que, la verdad, no me esperaba para nada y me hicieron sufrir durante todo el desarrollo de la historia. La historia, sobre todo una vez terminada, me hizo pensar y reflexionar sobre algunas cosas. La autora crea una historia que a primera vista puede resultar sencilla pero que no es tan fácil como puede parecer y donde consigue que el lector se implique con Kiko y los acontecimientos que le van sucediendo a su vez.
La belleza no es algo único. La belleza es soñar, es diferente para cada uno, y existen tantas versiones de ella que es imposible controlar cómo la ves.Los capítulos en su gran mayoría eran cortitos y se leían de forma bastante rápida. En cada capítulo se destapaba alguna pequeña parte de algo que parecía que no iba a tener peso a lo largo de la historia pero que la gran mayoría de detalles eran importantes. Sinceramente, a mí el ritmo no se me hizo nada lento, al contrario. Al ser una lectura conjunta, a veces me daba pena parar porque quería leer más y estoy segura de que de haberlo leído por mi parte, me habría durado mucho menos tiempo. Me ha encantado la forma de escribir de Akemi. A pesar de los toques crueles que tiene la trama, se nota que la historia está escrita con mucho mimo y cariño.
Sin duda, lo que más peso tiene en este libro junto a los acontecimientos que van sucediendo en la trama, son sus personajes. El gran peso de la historia lo lleva Kiko, nuestra protagonista. Pero encontraremos otros personajes (mejores y peores, aunque en este libro los peores son muy peores) que nos harán sentir un gran abanico de sentimientos a medida que vayamos descubriendo qué va sucediendo en la vida de la protagonista. Destaco sobre todo el gran crecimiento personal y la gran evolución de nuestra protagonista, a la que vemos poco a poco hacerse un poquito más fuerte sobre toda esa gente que solo busca herirla y hacerla estar triste. También tengo que destacar el personaje de Jamie, que sin duda es un gran peso para que Kiko pueda crecer como persona, pero a su vez no es su muleta, sino que Kiko consigue crecer sin necesitarse a nadie más que a ella sola, y eso, personalmente, creo que es un gran mensaje. El personaje de Jamie es un amor y nos hará suspirar muchas veces durante la novela.
Por otra parte, como os he dicho, los malos personajes, los que le hacen sufrir a Kiko... Van mucho más allá de lo que yo esperaba y buff, a ratos era durillo leer según qué cosas que nos contaba nuestra protagonista y, sobre todo, ver cómo para ella era muy complicado enfrentarse a todo eso sola.
Los corazones no están hechos para romperse una infinita cantidad de veces.Este libro ha hablado sobre el crecimiento personal de alguien (en este caso de Kiko), nos ayuda a ver que hay que curarse a uno mismo antes de tomar ciertas decisiones, nos enseña lo importante que es el amor propio y también el amor hacia los demás. Pero también nos habla de abuso sexual, de la baja autoestima, de la familia y como esta no siempre es sana para nosotros. Me ha gustado muchísimo leer la historia de Kiko y de Jamie y ojalá no sea lo último que lea de la autora, ya que su prosa me ha gustado mucho y me gustaría leer más historias suyas.
'Estrella de Mar' ha sido una novela que me ha llegado al corazón. Me he enamorado de su romance, he odiado a la gente que buscaba hacerle daño y ha sido un libro que me ha hecho reflexionar muchísimo. Ha ido directa a mi lista de mejores lecturas de este 2020.
- Gracias a Fandom Books por el ejemplar -
Hola!!
ResponderEliminarPues no conocia el libro pero con la reseña tan bonita que has puesto no puedo más que apuntarmelo.
Gracias por el descubrimiento :)
besotes.